Hay discos que, sin serlo, parecen hechos para ser la banda sonora de alguna película. Y más cuando sus historias son tan similares, como es el caso del álbum «For Emma, Forever Ago» del grupo Bon Iver (www.boniver.org) y la película «Into the Wild» dirigida por Sean Penn («Into the Wild» – trailer). Esto, claro, sin querer desmerecer el excelente trabajo de Eddie Vedder con la banda sonora original de esta gran película.
La historia de Justin Vernon, líder y principal artífice de la música de Bon Iver, y la del joven Christopher McCandless, protagonista de la película, tienen como principal similitud, el hecho de que en un momento de sus vidas deciden tomarse un tiempo para un retiro lejos de la civilización. Como diferencia, Christopher, alias Alexander Supertramp, emprende su viaje hacia Alaska guiado por su espíritu rebelde, su afán de descubrir una vida más allá de la estipulada por la sociedad que le rodea e inspirado por autores como León Tolstói o Jack London, mientras que Justin Vernon se refugia durante 3 meses en una cabaña de Wisconsin para recuperarse de las decepciones que le supuso el fracaso de su último grupo, su ruptura sentimental y sobretodo para curarse de la enfermedad que en ese momento le afectaba (mononucleosis hepática).
Es en ese período de total soledad, se concibe el álbum «For Emma, Forever Ago«, compuesto y producido por Justin, y grabado con las limitadas condiciones que disponía en su retiro. Quizás por eso el álbum tiene ese sonido tan crudo. (…) Este es uno esos discos capaces de cambiar el ambiente de la sala desde el primer acorde, de mantenerte en silencio durante sus 37 min, y dejarte con un aprieto en el pecho al escuchar a Justin Vernon levantarse de la silla cerrando el disco después del espléndido «re: Stacks».
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